Herbert Chávez este joven filipino de 35 años ha pasado por el quirófano hasta 16 veces para parecerse a Superman: desde el aumento del mentón hasta los implantes de caderas, pasando por una rinoplastia y silicona en los labios para hacerlos más gruesos y carnosos.
Pero esta obsesión va más allá: Tiene una impresionante colección de productos de Superman. Su casa de la ciudad de Calamaba, al sur de Manila, está llena de estatuas a tamaño natural del héroe, figuras de acción, ropa, comic y carteles.
Un psicólogo le ha diagnosticado un trastorno dismórfico corporal, es decir, que tiene obsesión con hacer cambios estéticos en cuerpo.
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