Jess Lyndon, una adolescente británica sufría desde hacía tres meses fuertes dolores de cabeza y mareos, después tuvo una caída y ahora está atrapada en su casa, en Walsgrave, Coventry, como en un 'impasse' de tiempo.
Desde que los médico le diagnosticaron el "Síndrome de Susac" para Jess Lydon, su vida es como un día de la marmota permanente. La joven solo puede recordar lo que le sucede en las últimas 24 horas."No puedo recordar la Navidad o la fecha de mi cumpleaños", explica Lyndon. Su enfermedad es tan rara que solo hay 250 casos reportados en todo el mundo.
Los médicos tampoco lo saben, ni siquiera conocen qué desencadena la enfermedad, pero los síntomas pueden tardar hasta cinco años en desaparecer . En los casos más extremos los pacientes pueden perder la vista o el oído.
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